A lo largo de nuestras vidas, cada uno de nosotros, podemos vivir circunstancias difíciles y sentirnos desbordados, bloqueados o incapacitados por el sufrimiento.

Como consecuencia, podemos adoptar comportamientos que resultan perjudiciales y que pueden llegar a interferir en nuestra vida de manera significativa.

Surgen entonces problemas en diferentes ámbitos, ya sea en el área laboral, familiar, de pareja, con las relaciones sociales u otros, y vemos que nuestra vida queda cada vez más limitada. Ante ello, nos podemos sentir perdidos, sin saber cómo manejar o dar salida a nuestro malestar.

Es en esos momentos, cuando comenzamos a percibir los problemas generados, cuando solicitar apoyo psicológico puede ser un paso importante en la mejora de nuestra salud emocional y calidad de vida.